Las grietas en las paredes son antiestéticas, sobre todo cuando aparecen en el interior de una vivienda. Pero ¿Cuánto deberíamos preocuparnos cuando vemos grietas peligrosas en las paredes?
Si nos encontramos ante una grieta estética, que solo ha afectado a nivel del yeso de las paredes, podemos emplear soluciones de bricolaje para su reparación. Pero también es cierto que a veces estas grietas pueden esconder un problema mayor, por lo que siempre es recomendable contactar con un profesional primero.
En este artículo nos centraremos en las grietas peligrosas en las paredes, analizando las causas, los riesgos y las acciones a realizar. Especialmente en las grietas que afectan a los tabiques o muros interiores de nuestro edificio.
¿POR QUÉ APARECEN GRIETAS EN LAS PAREDES?
Las causas de la aparición de una grieta son múltiples, pueden venir provocadas por ejemplo por la estacionalidad, este es el caso de los áticos, donde el gradiente térmico entre el verano y el invierno es constante y las grietas pueden expandirse.
Independientemente de la antigüedad de un edificio, la construcción sufre pequeños ajustes que pueden manifestarse a través de un patrón de grietas. Estas grietas serán diferentes según la causa, por ejemplo: el empleo de diferentes materiales y diferentes tecnologías de construcción perfectamente colocados en adherencia, dinteles y correas de aberturas adheridas a las paredes o juntas simples en falsos techos o paredes de pladur (cartón yeso).
¿CUÁNDO NOS ENCONTRAMOS ANTE GRIETAS PELIGROSAS EN LAS PAREDES?
Las grietas finas que tienen menos de un milímetro de ancho o entre uno y cinco milímetros generalmente no son motivo de preocupación. En estos casos lo más probable es que la fisura esté en el yeso, no tanto en la pared o muro.
Una grieta puede ser peligrosa cuando tiene entre 5 y 15 milímetros de ancho (casi pasa un dedo por ella). Es poco probable que surjan grietas como esta en virtud del yeso seco. Las grietas de este ancho podrían ser un síntoma de daño estructural, falla u otra patología.
Una grieta tan grande podría dar lugar a la necesidad de realizar obras de gran envergadura, imprescindibles para la seguridad del edificio.
Para conocer la gravedad y peligrosidad de las grietas, es necesario analizar su forma: pueden ser síntoma de un cambio de carga o de una gran carga aplicada al muro, aunque no sea estructural.
En el caso de grietas verticales de más de 0,5 cm de ancho, puede haber una causa más grave que se debe considerar seriamente.
Discurso similar para las grietas diagonales que podrían ser el signo de movimientos estructurales, que no deben subestimarse en absoluto.
La clásica lesión en “X” podría ser consecuencia de una acción sísmica: significa que el muro ha descargado la acción del sismo y necesariamente debe ser reparado.
¿CÓMO DEBEMOS ACTUAR CON LAS GRIETAS?
Las grietas pequeñas y delgadas en una pared se pueden reparar con relativa facilidad. En los casos más graves, aquellos en los que peligra la estabilidad del edificio y por tanto también la seguridad de quienes lo habitan, es necesario intervenir.
Sin embargo, también debemos prestar atención a la forma en que intervenimos. El consejo, de hecho, es contactar con profesionales especializados. El uso de soluciones de bricolaje podría causar aún más daño.
La mejor manera de reparar una grieta es la siguiente: en primer lugar, es necesario comprender la causa, identificar el rol del muro en el entramado estructural, hacer intervenir a una empresa especializada para evaluar las posibles soluciones. Una de las más rápidas y eficaces suele ser la consolidación del terreno de cimentación con inyecciones de resinas expansivas.
Desde Uretek podemos ayudarte, ofrecemos inspecciones y presupuestos gratuitos en toda España. Si han aparecido grietas peligrosas en las paredes de tu casa no dudes en contactar con nosotros. Te asesoraremos para encontrar la mejor solución para arreglar el problema.