RecompresIón de terreno para reducir los efectos de un terremoto

    Para ello se empleo la tecnología Deep Injections.

     

    A raíz de los terremotos del 2011 el edificio sufre una serie de daños que tienen que ver con la configuración estructural y la geometría singular del mismo. Un año después se llevan a cabo unas actuaciones de emergencia para el refuerzo estructural y la recuperación de la estabilidad.

    Una vez garantizada la estabilidad, desde Uretek intervenimos para mejorar la consolidación del terreno de cimentación.

    LA SOLUCIÓN DE URETEK PARA CONSOLIDAR EL TERRENO

    En Uretek somos líderes en la realización de inyecciones de resina, tras estudiar este caso planteamos una solución al problema a través de nuestro método Deep Injections. No solo consolidando el terreno, sino también amortiguando las ondas superficiales que generan los sismos y con ello evitar posibles patologías causadas por futuros movimientos.

    La intervención se realizó con dos trabajadores de Uretek, empleando herramientas manuales, de una forma muy limpia. El camión-taller se implantó en un solar exterior del edificio, muy cercano y a través de una manguera que tiene hasta 80 metros de longitud podemos llegar a cualquier punto.

    Se hizo un plan de intervención para los 11 días que duró la obra. Se sectorizaron cuatro zonas en las que en función de donde estuviéramos trabajando, podía haber vehículos aparcados en las otras tres zonas. Evitando así interrumpir el desarrollo normal de la vida de las personas.

    FASES DE LA INTERVENCIÓN DE RECOMPRESIÓN Y CONSOLIDACIÓN DEL TERRENO

    Lo primero que hacemos una vez llegados a la obra es identificar la zona de intervención e identificar también todas las instalaciones que podamos tener enterradas.

    Una vez determinada la profundidad de apoyo de cimentación hacemos los ensayos de penetración dinámica para ver que compacidad tiene el terreno debajo de cada una de las zapatas. Con estos ensayos determinamos las profundidades a las que debemos inyectar.
    Posteriormente pasamos a ejecutar las perforaciones en cada una de las zapatas, a través de las cuales insertamos las vainas de inyección que dejamos a distintas profundidades.

    Se inyecta una resina que tiene una gran presión de expansión. La resina va tratando el terreno, rellenando los huecos y compactándolos. Una vez ejecutadas todas las inyecciones se cortan las vainas y se dejan tapadas las perforaciones.

    La comunidad de propietarios eligió la técnica de Uretek ya que era la menos agresiva, siendo mínimamente invasiva, porque permitía utilizar parte del parking durante la realización de la intervención y porque la gran relación calidad/precio del servicio.